Disney parece haber identificado a la culpable de este fracaso: su protagonista, Rachel Zegler.
La actriz estuvo en el centro de una controversia cuando, en agosto de 2024, tuiteó:
“y siempre recuerden, Free Palestine”
tras el éxito del tráiler de la película.
Además, sus críticas abiertas a la versión original del clásico animado también afectaron la percepción del público desde antes del estreno.
El conflicto escaló cuando Gal Gadot, coprotagonista de la película y ciudadana israelí, recibió amenazas de muerte, lo que obligó a Disney a reforzar su seguridad. Gadot ha expresado abiertamente su apoyo a Israel en el conflicto con Gaza, lo que provocó aún más polarización entre la audiencia.
Otro punto de tensión ocurrió tras las elecciones presidenciales en Estados Unidos, ya que, Rachel Zegler compartió mensajes críticos hacia Donald Trump y sus seguidores, lo que generó preocupación dentro de la compañía. Como medida preventiva, Disney le pidió a la actriz que trabajara con un asesor de redes sociales para evitar más controversias antes del estreno.
A nivel financiero, Blancanieves tuvo un desempeño por debajo de lo esperado. En su primer fin de semana recaudó solo 87 millones de dólares a nivel internacional, una cifra insuficiente para cubrir su presupuesto de más de 270 millones.
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