El alcalde Brandon Johnson anunció que la ciudad de Chicago extenderá el límite de 60 días de permanencia para los solicitantes de asilo en los albergues de la ciudad. Esta medida se tomó unos días antes de que venciera un plazo que hubiera obligado a desalojar a casi 2,000 migrantes.
La decisión busca brindar más tiempo a las personas para reubicarse y encontrar empleo. La extensión añade entre 30 y 60 días para los aproximadamente 14,000 migrantes alojados en los 28 albergues de la ciudad, que incluyen bodegas y edificios del distrito de parques.
Chicago ya había pospuesto la aplicación de desalojos en dos ocasiones anteriores debido a condiciones climáticas adversas. El alcalde Johnson destacó que el plan de albergue temporal de emergencia no busca ser una solución a largo plazo, pero pretende dar a las personas y familias el tiempo necesario para procesar permisos de trabajo, encontrar vivienda y comenzar una nueva vida en la ciudad.
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