El Senado confirmó a Ketanji Brown Jackson a la Corte Suprema el jueves, rompiendo una barrera histórica al asegurar su lugar como la primera jueza negra y dando al presidente Joe Biden un respaldo bipartidista por su esfuerzo por diversificar el alto tribunal.
Los aplausos sonaron en la cámara del Senado cuando Jackson, un juez de la corte de apelaciones de 51 años con nueve años de experiencia en el tribunal federal, fue confirmado 53-47, en su mayoría a lo largo de las líneas del partido, pero con tres votos republicanos. Presidiendo y anunciando emotivamente la votación estuvo la vicepresidenta Kamala Harris, también la primera mujer negra en alcanzar su alto cargo.
“Este es un día maravilloso, un día alegre, un día inspirador, para el Senado, para la Corte Suprema y para los Estados Unidos de América”, exclamó el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer. Las galerías superiores del Senado estaban casi llenas por primera vez desde el comienzo de la pandemia hace dos años, y alrededor de una docena de miembros de la Cámara, parte del caucus negro del Congreso, estaban en la parte posterior de la cámara.
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